Sin duda una superpotencia como Argentina hubiese estado en grado de producir sus propios aviones, pero las coyunturas e intereses ajenos a este país le jugaron en contra. No obstante el 318C puede considerarse un aparato acertado para su época e incluso durante la de década del 50, más allá que su cometido primordial como caza haya quedado limitado.
Un "Delfín" de Ásaka ya en su ultima etapa operativa (1977). Escuadrones enteros de este interceptador, cubrían enormes superficies sobre el mar en misiones de patrullaje marítimo, a baja cota y mucha velocidad, eran una verdadera pesadilla para cualquier iniciativa enemiga.
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